Cursos de Verano

“Un smartphone en manos de los adolescentes sin el control de sus padres es una bomba de relojería”

El periodista Rafael Cremades advierte sobre la importancia de la educación y de la vigilancia parental en el uso de las nuevas tecnologías para evitar los casos de ciberdelincuencia de género entre adolescentes

Rafael Cremades en la sede de la UPO en Carmona
Rafael Cremades en la sede de la UPO en Carmona

“Todo pasa por la educación. Y no sólo en los centros educativos, sino también en las familias, porque tan importante es una adecuada formación de los docentes como la aceptación de la enorme responsabilidad que supone ser padres en la era de Internet. Porque un smartphone en manos de los chicos sin control parental es una bomba de relojería”. Es la medida que propone el periodista Rafael Cremades para combatir la principal herramienta que utilizan los jóvenes andaluces a la hora de ejercer la violencia de género contra sus parejas o ex parejas: las redes sociales, según reconoce la propia Junta de Andalucía.

Cremades ha hecho estas declaraciones en el marco de la XVI edición de los Cursos de Verano de la Universidad Pablo de Olavide en Carmona, donde se desarrolla el curso ‘Ciberdelincuencia de género: desde el control 2.0 a las viola-graba-ciones’, que dirige Jorge Coronado Díaz, hácker ético y perito informático en QuantiKa14 y en el que participa el periodista de Canal Sur pronunciando una conferencia sobre ‘Los medios de comunicación tradicionales y las TIC: ¿Alianza perversa o positiva en el marco de la violencia de género’.

Mientras que jóvenes y adolescentes son nativos digitales, sus padres pertenecen a una generación anterior que desconocen las nuevas tecnologías en buena medida y que, para colmo, tampoco disponen de tiempo para educar a sus hijos en un uso responsable de las TIC porque muchos de ellos permanecen ajenos a este fenómeno. Así, estos dos factores, desconocimiento y falta de tiempo, hacen que muchos progenitores ignoren cómo interactúan sus hijos en las redes sociales o qué consumo realizan de Internet. Mientras tanto, los chicos cada vez comienzan más jóvenes a utilizar móviles y redes sociales. “Regalar un móvil a un niño de 10 años para la comunión es una barbaridad y esto lo vemos como algo cotidiano”.

En una sociedad en la que el uso de Internet está generalizado, Rafael Cremades ve “muy difícil” prevenir la ciberdelincuencia de género, pero propugna por “abordar la educación desde un punto de vista ético feminista porque, al fin y al cabo, Internet es sólo una herramienta y el uso que se hace de ella responde a los comportamientos machistas generales de hoy”. Considera que debe haber una transformación social y pide no banalizar este tipo de actitudes y ponerlas siempre en conocimiento de la justicia.

Sobre la existencia de chicas que consideran algo normal que sus parejas les controlen el móvil y sus redes sociales, Cremades asegura que se han interiorizado los estereotipos machistas y que son los progenitores quienes tienen que hablar con ellas “desde la confianza” y vigilar las conductas que pudieran ser machistas en los varones “cortándolas de raíz”. En cuanto al papel que desempeñan los medios de comunicación tradicionales en este asunto, reconoce que en determinados casos “se busca el show y se pone a la audiencia por encima de todo”, por lo que nos encontramos en “determinadas series de televisión o letras de canciones inadmisibles; no se puede dar todo por bueno”, subraya. Además, apunta que, cuando llegan las noticias de corte machista, “debe mantenerse el espíritu crítico en casa; el problema es que ya no se ven los informativos en familia y la recepción de la información procedente de múltiples plataformas se ha atomizado”.

27 de junio – 19:30 h