Organizado por el grupo de Investigaciones en Ciencias Penales y Criminológicas (CIPEC) de la Universidad Pablo de Olavide, esta mañana ha finalizado en la Biblioteca/CRAI el Congreso de Política Criminal ‘Nuevas tendencias y modernos peligros’; un simposio en el que han participado expertos en distintos ámbitos del Derecho penal y de la Criminología que han llamado la atención sobre la deriva de las últimas decisiones legislativas en materia penal.
Celebrado en torno a tres sesiones durante los días 12, 19 y 30 de noviembre, y dirigido por los profesores de la UPO Viviana Caruso y Víctor M. Macías, el congreso ha dado a estudiantes y profesores la oportunidad de debatir sobre la incongruencia de exigir al Estado unos niveles máximos de seguridad sin que ello menoscabe los derechos y garantías individuales. Se trata de una contradicción en la que suele caer la sociedad y que se manifiesta en distintos ámbitos.
En el Congreso se ha tratado, además, la nueva tendencia de la política criminal que se basa en la finalidad de procurar la satisfacción de la víctima. Así, al percatarse los partidos políticos del atractivo electoralista que supone defender una posición en favor de las víctimas, éstas han cobrado todo el protagonismo en la nueva política criminal, lo cual supone un constante reclamo de más y mayor castigo basado en la idea de que el Derecho penal es el instrumento idóneo para solucionar problemas sociales complejos. Precisamente el catedrático de Derecho penal de la Universidad Humboldt de Berlín, Luis Greco, ha intervenido en la última sesión celebrada esta mañana con la ponencia ‘Crítica a la teoría de la pena orientada a las víctimas’.
El Congreso de Política Criminal ha contado con el apoyo de la Facultad de Derecho, cuyos estudiantes han podido cuestionarse la oportunidad de las decisiones legislativas, así como tomar conciencia de la necesidad de mantener una actitud crítica.
