Cursos de Verano

El crítico Manuel Martín asegura que existe una juventud “extraordinaria” que garantiza el futuro del flamenco

El periodista lamenta que determinados medios de comunicación nacionales están haciendo un “daño terrible” al flamenco y tirando por la borda el proceso de dignificación de 50 años por “desconocimiento”

Manuel Martín en la sede de la UPO en Carmona
Manuel Martín en la sede de la UPO en Carmona

El periodista Manuel Martín Martín, crítico de flamenco con una trayectoria profesional de 40 años a sus espaldas, ha asegurado en Carmona que existe una “juventud extraordinaria y responsable” que será capaz de afrontar con éxito el futuro inmediato del flamenco y que, “aunque a veces los llamemos de escuadra y cartabón por tener una formación más academicista y menos dionisiaca, van a garantizar el futuro de este arte”. Martín ha añadido que lo más importante es que los jóvenes flamencos “tienen inquietudes por conocer lo que nos ha traído hasta aquí y se estimulan porque tienen ganas de expandirse por los espacios abiertos de la música, lo que me parece muy plausible siempre que se haga con respeto a la tradición y con dignidad”.

El flamencólogo astigitano ha hecho estas declaraciones antes de participar en el curso ‘El porqué del flamenco. Poderío, singularidad, universalidad’, que se ha impartido en Carmona desde el pasado miércoles dentro del programa de la XVI edición de los Cursos de Verano de la Universidad Pablo de Olavide, donde ha pronunciado la conferencia titulada ‘El impacto del flamenco en la cultura española’. El seminario ha estado dirigido por Ildefonso Vergara, investigador en flamenco y periodista de la Cadena SER; e Inmaculada Bustos, filóloga y gestora cultural de International Studies Abroad.

Martín, que este año suma cuatro décadas como crítico de flamenco desde que iniciara su trayectoria profesional en Radio Écija allá por 1978, ha advertido asimismo de que determinados medios de comunicación de ámbito nacional, actuando “desde el desconocimiento”, están haciendo un “daño terrible al flamenco, porque están subiendo al Olimpo de los dioses a una cantidad de auténticos mamarrachos –dicho desde el respeto personal, que no artístico- que están tirando por la borda todo el proceso de dignificación que se ha hecho en los últimos 50 años”. Y ha seguido criticando los circuitos de mercadotecnia que “nada tienen que ver con el flamenco”, a los que ha calificado como “delito cultural”, al afirmar que “es muy peligroso subir al escenario a ídolos de barro que no rozan ni tan siquiera tangencialmente lo que es la esencia de este patrimonio de la cultura andaluza”.

Autor de varios libros sobre el flamenco, Martín Martín ha lamentado que algunos chavales de hoy día quieran “pegar el pelotazo” y ha criticado a “todos los palmeros que van detrás y a esos medios de comunicación nacionales” por considerar que están haciendo un “flaco favor al flamenco y a los hacedores de este arte, quienes sí tienen la responsabilidad, hoy en día, de mantener la esencia de este hecho diferencial andaluz” porque “no se puede uno subir al escenario a hacer el indio, eso duele mucho en el fuero interno porque hemos conocido a mucha gente que ha pasado un hambre feroz literalmente y ha quedado en el anonimato”.

Durante su intervención en el curso de verano, el periodista ha hecho un repaso por los “distintos enfoques del impacto y la influencia que el flamenco ha tenido en la escultura, en la pintura, en el cine, en la literatura y en los compositores de la música culta”, aparte de abordar el movimiento de ida y vuelta para poner el colofón “en la llegada de uno de los músicos más privilegiados que hemos conocido, como Manolo Sanlúcar, cuando hace la partitura musical a los cuadros de Romero Ressendi”, ha resumido. Por otro lado, ha resumido la evolución del flamenco hasta la aparición de la terminología “cante jondo” y cómo el proletariado extiende este folclore andaluz a otras zonas de trabajo dentro y fuera de la región, como Murcia o Extremadura, configurando un nuevo género musical que son “coplas con dosis de dolor, surgiendo el cante jondo como terminología desde finales del siglo XVIII para acá”.

Curso 2024/25