“Nuestros retos se centran en la convergencia europea, los títulos de grado y la movilidad de los estudiantes”

¿Qué balance hace de todos estos años como decano de la Facultad de Ciencias Empresariales?

A nivel institucional el balance ha sido de mucho trabajo, ya que nos hemos embarcado en un proceso de cambio hacia la implantación del eurocrédito. Somos la facultad con mayor número de alumnos y poner en marcha la experiencia piloto ha sido todo un reto. Por otra parte, los recursos no han crecido como deberían haberlo hecho y, pese a ello, nuestra facultad se ha caracterizado por querer hacer cosas nuevas, por querer diferenciarse de las facultades similares del entorno. Los profesores tienen ambiciones científicas y quieren hacer una carrera docente digna.

¿Quiénes integran el equipo decanal y cuál es la competencia de cada uno?

Todos los equipos decanales que he tenido han sido magníficos. Actualmente la Facultad de Ciencias Empresariales cuenta con cuatro vicedecanos. El vicedecano de Ordenación Académica, José Antonio Ordaz Sanz, lleva todos los temas de planificación docente: grupos, turnos, organización de calendarios, horarios, es decir, todo lo que es la organización académica. El vicedecanato que nosotros llamamos de Relaciones con Empresas e Instituciones lo lleva José Carlos Miranda, y además de las prácticas en empresas se ocupa de todo lo relacionado con el impulso de las relaciones con el exterior a nivel local. Trata el fomento de los convenios con empresas para prácticas y otras actividades y el fomento de relaciones con otras instituciones, ya sean públicas o privadas.

El vicedecanato de Relaciones Internacionales, que está a cargo de Cecilia Téllez Valle, tiene en nuestra facultad mucha importancia, ya que tenemos una tasa de movilidad muy elevada. Este vicedecanato lleva los programas internacionales de intercambio, de profesores y alumnos de la facultad. Recientemente, José Manuel Feria Domínguez se ha incorporado al cargo de vicedecano de Estrategia y Calidad, encargado de elaborar el primer Plan Estratégico de la Facultad. Por último, también tenemos que recordar al personal administrativo, Marilyn Domínguez Lozano, David Ortega Galdeano y Mª Gracia Postigo Domínguez, que es fundamental.

Hábleme de la oferta académica de esta facultad

La Facultad de Ciencias Empresariales ofrece cuatro titulaciones, dos de ellas son titulaciones propias: Licenciatura de Administración y Dirección de Empresas y Diplomatura de Ciencias Empresariales; y dos son titulaciones conjuntas con la Facultad de Derecho: la doble Diplomatura en Relaciones Laborales y en Ciencias Empresariales y la Licenciatura Conjunta en Derecho y Administración de Empresas.

Se trata de titulaciones que tienen muchas salidas profesionales. Somos profesionales versátiles, ya que un alumno de esta facultad puede trabajar en todos los puestos de la gestión, dirección y administración pública o privada. Y esa versatilidad es la mayor ventaja a la hora de salir al mercado laboral, por eso estas titulaciones tienen tanto éxito. A esto le añadimos ingredientes que hacen diferentes a nuestros estudiantes, por ejemplo, las especialidades que están diseñadas pensando en la salida profesional, o la oferta progresiva del título de LADE en inglés. También hay que destacar dos aspectos importantes: la movilidad de nuestros estudiantes y las prácticas en empresas que realizan la mayoría de ellos.

¿Qué retos y qué proyectos se plantea hoy en día su decanato?

Nuestros retos están enmarcados en el mismo contexto: la convergencia europea, los títulos nuevos de grado y la movilidad de los estudiantes. Todo ello sin perder de vista nuestra sociedad. En cuanto a la Convergencia Europea vamos muy bien encaminados, ya que llevamos dos años de experiencia. Mi preocupación radica más en el diseño del título de grado. Queremos diseñar nuestros planes de estudio contando con la sociedad sevillana. Nuestra intención es crear un consejo formado por la Junta de Facultad y por representantes de colegios profesionales e instituciones para que nos digan qué demanda la sociedad y no caigamos en un diseño endogámico de los nuevos títulos. Pretendemos dar respuesta a una demanda social real.

Relacionado con el Espacio Europeo, nuestro deseo es estar a la cabeza a nivel andaluz y nacional en el ámbito de la internacionalización. El hecho de que nuestros estudiantes hayan adoptado la cultura de la movilidad nos facilita el camino, pero si queremos duplicar la oferta hay que emplear más esfuerzos y recursos. La herramienta fundamental, si entramos en ese esquema, sería crear acuerdos permanentes con universidades extranjeras para dobles titulaciones. Es decir, que nuestros estudiantes pudieran pasar cualquier cuatrimestre de su carrera allí y sus estudiantes pudieran pasarlo aquí. No se trata del programa Erasmus, sino de tener la posibilidad de que nuestros alumnos tengan una doble titulación: la de la UPO y la de la universidad extranjera correspondiente. Esto propiciaría también que el profesorado se relacione con profesores de gran prestigio de universidades extranjeras.

¿Qué balance hace de esta universidad, desde su creación hasta la actualidad?

La universidad se ha hecho un hueco, en muy poco tiempo y con un prestigio notable. Las titulaciones de esta institución tienen mucha demanda, lo que quiere decir que la sociedad está valorando muy bien a la Pablo de Olavide. A nivel de investigación también contamos con investigadores muy buenos. Hemos hecho una universidad diferente con escasos recursos. Tenemos un éxito notable.