El Consejo Social de la Universidad Pablo de Olavide, presidido por Amparo Rubiales, ha aprobado, en sesión celebrada hoy miércoles en el Rectorado y a propuesta del Consejo de Gobierno, las cuentas anuales de la Universidad correspondientes al ejercicio 2018.

La memoria económica anual es el documento a través del cual las universidades rinden cuentas del ejercicio anterior, tanto internamente como ante los órganos fiscalizadores competentes. Auditadas por KPMG Auditores, la liquidación del presupuesto 2018 de la UPO tiene como principales cifras unos derechos reconocidos de 89,6 millones de euros, frente a unos gastos de 82,2 millones en total durante el mismo periodo.

Las transferencias corrientes suponen la mayor parte de los derechos reconocidos en 2018 con un 42,34 por ciento, seguidas de las transferencias de capital (38%) y de las tasas, precios públicos y otros ingresos (13,94%). En el mismo ejercicio, los gastos de personal supusieron el 59,62 por ciento del total, seguidos de la partida dedicada a inversiones reales (17,87%) y de los gastos corrientes en bienes y servicios (16,23%).

El saldo presupuestario del ejercicio 2018 en la Universidad Pablo de Olavide ha resultado positivo, con un remanente de tesorería no afectado acumulado, superávit, de 4 550 000 euros. El Consejo Social ha puesto en valor los datos de la memoria económica aprobada, ya que suponen una evolución positiva de los principales indicadores económicos y de solvencia de la UPO.