El estudio, publicado en la revista Translational Neurodegeneration, describe los efectos funcionales de la proteína Galectina 3 (Gal-3) en la actividad de los circuitos neuronales del hipocampo –estructura involucrada en procesos de plasticidad sináptica y de aprendizaje y memoria, entre otras funciones– y plantea su inhibición para paliar el deterioro neurológico producido por la enfermedad de Alzheimer y otros trastornos neurodegenerativos relacionados con la inflamación del cerebro.