El profesorado y el alumnado del Curso de Verano de la Universidad Pablo de Olavide ‘Arqueología de campo’, que se ha desarrollado en Carmona entre el 31 de julio y el 25 de agosto, ha descubierto un nuevo tramo de la calzada romana que podría ser la vía que unió las ciudades de Carmona y Sevilla, Carmo e Híspalis, hace más de dos mil años. El curso está dirigido por el jefe de servicio de la Delegación de Patrimonio del Ayuntamiento de Carmona y director del Museo de la Ciudad, Ricardo Lineros, y el arqueólogo municipal Juan Manuel Román.