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“Más arriba de Aldeaquemada, cuatro leguas, y a distancia de La Carolina, diez, se halla Montizón, con dos aldeas nombradas Venta de los Santos y Aldeahermosa fundación hecha sobre el camino de Barranco Hondo por donde se comunican con la parte de la provincia de Jaén los valencianos, murcianos y manchegos altos”.
Intendente Pedro Polo de Alcocer, 1833
En1768 se amplió el proyecto de colonización de Sierra Morena con nuevas fundaciones en torno al camino real de Madrid con Venta de Linares, Carboneros o El Rumblar; en el camino real de Valencia, antigua vía de Aníbal, se iniciaron Arquillos y Venta de los Santos, o Aldeaquemada en otro camino de acceso a Andalucía. A finales del 1769, se continuó con la demarcación de nuevas suertes que originaran la nueva colonia de Montizón. La feligresía se complementaría en 1775 con la fundación de Aldeahermosa. Para la creación de nuestra colonia se tomaron tierras al lugar de Castellar —Santisteban del Puerto en el Reino de Jaén—, Chiclana y Villamanrique (La Mancha).
Centrándonos en nuestros pueblos, el 12 de mayo de 1768 se iniciaron los trabajos en Venta de los Santos. En una carta que el superintendente Olavide envió a Miguel de Múzquiz la nombraba entre los nuevos puntos de población. En julio de 1768 estaban llegando los primeros colonos a Venta de los Santos bajo su director —posterior comandante civil— Mariano Aranguren, formando una feligresía con cuatro departamentos. La población tomó como base la antigua venta del mismo nombre y la ermita de Nuestra Señora de Nazaret, convirtiéndose la ermita en parroquial de la población bajo la advocación de la Inmaculada Concepción. El capellán mayor de Sierra Morena Juan Lanes y Duval colocó el sagrario y bendijo su nuevo cementerio a principios de 1768 con la autorización del vicario de Beas. La pila bautismal se colocó en febrero de 1770. También se dotó de una casa para comandante civil, pósito y hospital, mientras que duraron las epidemias de tercianas.
Pero Aranguren fue designado por el superintendente para fundar otra nueva colonia, Montizón, formada a finales de 1769 tomando como base el tercer y cuarto departamento de la feligresía de Venta de los Santos. Desde sus inicios Montizón se proyectó con una nueva iglesia y casa del comandante civil, seguramente con la idea de constituirse dos colonias separadas. Pero en junio de 1771 se trasladó la pila bautismal y el Sagrario a la iglesia de Montizón, convirtiéndose en parroquial, y bendiciendo un nuevo cementerio. Alrededor de 1789 se construyó un nuevo pósito en Montizón. Poco a poco Montizón fue asumiendo las funciones de capitalidad de las dos feligresías. En 1771 el superintendente Olavide se refería con alabanzas a la labor de Aranguren en estas colonias: «Después de haber hecho la Población de la Venta de los Santos con el mayor acierto, me pareció, por la experiencia que tenía de su talento, darle también la de Montizón. Y ha concluido una y otra con tanta felicidad que ambas son de las más florecidas en las colonias.». Aldeahermosa se estableció en 1775, nombrándose en sus inicios como aldea del Rio, siendo el núcleo que completó la feligresía. En ella se construyó una capilla. La plaza de Carlos III conserva la forma poligonal tan característica del urbanismo de las Nuevas Poblaciones atravesada por la línea maestra de suertes que vertebra a toda la feligresía. En torno a esta plaza se fueron disponiendo varias manzanas cuadrangulares formadas por las casas de los colonos. El antiguo camino de Valencia a su paso por la población conserva el nombre de calle Real en su recuerdo.
Progresivamente se fue reduciendo el número de familias de la feligresía que pasó de cuatro a tres departamentos, si bien la colonia se afianzó. La Guerra de Independencia la asoló debido a su estratégica situación, viéndose involucrada en uno de los enfrentamientos más conocidos de 1810. El general español Gaspar Vigodet defendió las posiciones de Venta Nueva y Venta Quemada durante dos horas de las tropas del general francés Sebastiani, que tenía orden de atravesar Sierra Morena por Montizón. En inferioridad, cuando vio que perdía su posición, Vigodet mando a sus fuerzas que se replegaran en orden hacia Montizón, desde donde iniciaron la retirada, causando las tropas francesas numerosos destrozos en la feligresía. Bajo el monarca José I Bonaparte formó entre 1810 y 1811 una municipalidad dentro de la Subprefectura de La Carolina —Prefectura de Jaén— hasta la salida de los franceses. Las Cortes de Cádiz volvieron a suprimir el Fuero, y aunque se intentó formar ayuntamiento en Montizón, finalmente, con la vuelta de Fernando VII se volvió a instaurar el Fuero nombrándose nuevo intendente a Pedro Polo de Alcocer. Se potenció la economía de las poblaciones basándose en los plantíos, si bien entre 1820 y 1823, con el Trienio Liberal se volvió a instaurar la Constitución de Cádiz, formando un ayuntamiento constitucional dentro de la provincia de Jaén. Con la vuelta de Fernando VII en 1823 se volvió a nombrar intendente a Polo de Alcocer, continuando con los planes de plantíos.
El cinco de marzo de 1835 Isabel II, bajo la regencia de María Cristina de Borbón, se decretó la supresión de la Intendencia de Nuevas Poblaciones, lo que supuso la creación definitiva del ayuntamiento de Montizón, con sus anejos de Aldeahermosa y Venta de los Santos, y su adscripción a la nueva provincia de Jaén. Sin la protección del Fuero, el sistema económico del municipio se vio afectado, disminuyendo el número de propietarios, si bien el número de habitantes fue creciendo, pues de los 358 de 1848, pasó a los 817 de 1887. Al año siguiente, 1888, Montizón fue fusionado con el municipio de Castellar de Santisteban, perdiendo su independencia. Montizón, Aldeahermosa y Venta de los Santos continuaron como aldeas hasta que en 1906 consiguieron la restitución de su independencia municipal. En esta nueva etapa, el número de habitantes fue creciendo pasando de los 1.321 de 1910, a los 3.396 de 1960, en clara relación con el auge minero de la comarca de Sierra Morena en un principio, pero también con los aprovechamientos forestales y agrícolas. En la actualidad el municipio se sitúa en torno a los mil ochocientos habitantes. En pleno siglo XXI, el olivar, heredado de su etapa colonial, continúa siendo una de sus actividades económicas más importantes. También destaca la caza mayor y menor, y la ganadería.
Parroquia de la Inmaculada Concepción
Este nuevo templo se bendijo en 1771 bajo la advocación de la Inmaculada Concepción, colocándose una pintura de la Purísima en el altar. El templo está compuesto de una sola nave cubierta por una techumbre de madera plana con el coro elevado a los pies. Destaca la portada, formada por un arco de medio punto, y una espadaña que aumentó de una a tres campanas en 1943. Las imágenes que se atesoran en el templo son posteriores a la Guerra Civil excepto una Dolorosa que fue restaurada por Constantino Ungetti Leive después del conflicto. En ella se custodian los libros parroquiales de toda la feligresía.
Ayuntamiento (Casa del comandante civil)
La primera casa del comandante civil de la feligresía se realizó en Venta de los Santos. Con la fundación de Montizón se edificó otra casa para el comandante civil, manteniendo ambas. En 1791 se reconstruyó la casa con su cárcel. Con la supresión de la Intendencia se ubicó en ella el ayuntamiento hasta que en 1888, con la desaparición del municipio, el edificio pasó a ser casa cuartel de la Guardia Civil hasta que en 1944 se suprimió este puesto. En los años sesenta fue casa de vecinos y posteriormente sede de asociaciones. En 1993 se construyó en ella el nuevo ayuntamiento, que se había situado desde 1906 en la plaza de la Iglesia, hoy plaza Doctor Rey Martínez (casa del secretario).
Casa del cura
El Fuero de Sierra Morena estipulaba que junto a la iglesia se construiría «una habitación y puerta para el párroco». Con la creación de la colonia de Venta de los Santos se situó allí la primera casa del cura, pero con la construcción de la iglesia en Montizón se edificó una nueva. La vivienda conserva su antigua fisionomía con su fachada encalada. La planta baja con puerta y una ventana a cada lado, y la superior con un balcón y dos ventanas.
Real Pósito de Labradores y de Diezmos
Con la fundación de Venta de los Santos se le dotó de un pósito provisional, si bien en 1774 se construyó el de labradores. Entre 1788 y 1789 se iniciaron las obras de un nuevo pósito en Montizón con dos naves y cuerpo alto. Presenta una fachada lisa y encalada, donde resaltan los vanos de las ventanas y puertas enmarcados por piedra. La construcción posee sótano y sus respiraderos están realizados a modo de saeteras. Con la creación del puesto de la Guardia Civil en torno a 1888, una parte del pósito fue utilizado como casa cuartel hasta que con la desaparición del municipio de Montizón en 1888 el ayuntamiento quedó sin uso, mudando el cuartel a dicho edificio. El pósito pasó a manos privadas, renombrándose como casa grande o de los Orozco.
Casas de Colonos
De sencilla construcción, las casas coloniales aprovechan los materiales de la zona, piedras, cal y tierra. Las primeras, de peor calidad, se realizaron fundamentalmente en las suertes. En varias ocasiones se fueron reconstruyendo con una o dos plantas y encaladas en su exterior. Las casas de dos plantas suelen tener la puerta flanqueada por dos ventanas y la cámara con dos o tres ventanucos. En el piso de abajo el pasillo daba acceso a dos habitaciones, la cocina y el dormitorio, junto con el acceso a las escaleras y la puerta del corral. La cámara se utilizaba como almacén de cereal y de aperos
Cementerio
En 1768 el capellán mayor Juan Lanes y Duval, con licencia del vicario de Beas, bendijo un nuevo cementerio cercado con tapias cerca de la Venta de los Santos. Pero con la fundación de Montizón, se construyó un nuevo cementerio cuya bendición la realizó en junio de 1771. El 30 de septiembre de 1771 se realizó el último enterramiento en el cementerio de Venta de los Santos, mientras que el primero del cementerio de Montizón fue el 2 de octubre de 1771. A partir de ese momento todos los colonos y vecinos del municipio han recibido sepultura en este lugar. Ampliado el recinto con el paso del tiempo, es uno de los pocos cementerios construidos por la Real Hacienda que se mantiene en uso.
Iglesia de San Juan Bautista de Aldeahermosa
Desde la época colonial Aldeahermosa se dotó de una capilla dedicada a San Juan Bautista. La imagen titular fue destruida durante la Guerra Civil, siendo las actuales posteriores al conflicto. A mediados del siglo XX se valoró la construcción de un nuevo templo, de mayor capacidad, ya que debido al crecimiento de la aldea se había quedado pequeño. En su interior una Dolorosa tallada en madera obra de Constantino Unghetti Álamo de 1954.
Iglesia del Cristo de la Expiración en Venta de los Santos
La apertura de la nueva iglesia de Montizón en 1771 determinó que volviera a convertirse en ermita de Nuestra Señora de Nazaret hasta que en 1774 los vecinos de Chiclana se llevaran en rogativa a la Virgen. Los colonos de Venta de los Santos arreglaron la ermita, colocando en el altar al Cristo de la Expiración que se encontraba en la sacristía en torno a 1780. La imagen titular del Cristo y una pequeña Inmaculada fueron destruidas durante la Guerra Civil, siendo las actuales posteriores al conflicto. En 1962 el primitivo templo fue demolido, cambiando la orientación de la portada hacia la plaza de Carlos III.
Ermita de San Isidro
Templo recientemente construido en el embalse del Dañador. En este lugar el municipio celebra desde hace algunos años la romería de San Isidro Labrador.
Ermita de San Ildefonso
Antigua ermita previa a la fundación de las Nuevas Poblaciones en el cortijo de San Ildefonso. Aunque abandonada, aún conserva parte de su antiguo esplendor como el retablo o la cúpula.
Cortijos y ventas
En el término municipal de Montizón se conservan numerosas construcciones relacionadas con las tareas agrícolas, pero también con la asistencia a los caminos. Aunque algunos son cortijos o casas de las suertes de los colonos, otros son construcciones anteriores a la colonización u construcciones realizadas al finalizar el Fuero en 1835. Destaca el cortijo de don Andrés, los cortijos de Palancares, el cortijo de San Ildefonso, la venta del Aire, etc.
Finca municipal El Sobrante
Durante la época colonial en Montizón había asignada una dehesa boyal para el disfrute de los colonos y pastos para arriendo. Con el fin del Fuero estas tierras pasaron a ser bienes de propios del municipio, siendo vendidos a particulares con el paso del tiempo. La finca municipal El Sobrante es herencia de aquella riqueza, siendo una parte del cuarto de Posadas. En la actualidad, El Sobrante continua utilizándose para pastos, pero también atesora una gran riqueza cinegética que es explotada por el municipio.
Centro de Interpretación de la Naturaleza de los Ecosistemas de El Condado
El centro introduce al visitante en la riqueza de la comarca. Desde el año 2015, gran parte de su término está dentro de la Zona Especial de Conservación de la Unión Europea “Red Natura 2000”.
San Antón Abad
En la noche del 16 se encienden las hogueras en las calles y plazas. Las familias consumen alimentos típicos, y algunos atrevidos saltan las hogueras.
Carnaval
De gran popularidad, los habitantes se disfrazan y pasean por las calles, se realizan concursos.
Semana Santa
Se realizan desfiles profesionales desde las iglesias del municipio. El Domingo de Resurrección se celebra el pintahuevos, donde todavía algunas de las familias cuecen y pintan huevos según la costumbre traída por sus antepasados.
San Marcos
Las familias y los amigos pasan un día de fiesta reunidos, normalmente en el campo. El dulce típico es el rosco de San Marcos.
Romería de San Isidro Labrador
Fiesta religiosa promovida por las Hermandades Sindicales de Labradores y Ganaderos en los años cuarenta del siglo XX, y que ha derivado hacia una romería en el pantano de El Dañador alrededor de la imagen de San Isidro, que se procesiona por los pueblos del municipio hasta su ermita. Durante la romería se cantan los tradicionales mayos, si bien en Venta de los Santos se continua con la tradición de cantar mayos delante de la iglesia del Cristo durante todo este mes.
San Juan Bautista
Fiesta patronal de Aldeahermosa que tiene su origen en la capilla que tenía dedicada el santo. Se celebran sus fiestas con la procesión, verbenas y sueltas de reses bravas.
Santiago Apóstol
Fiesta de Montizón dedicadas a Santiago El Mayor donde tienen gran importancia las verbenas.
Santísimo Cristo de la Expiración
Fiestas patronales de Venta de los Santos que tienen su origen en 1780. Se realiza la procesión, verbena y suelta de reses bravas.
Inmaculada Concepción
Como patrona se le dedica una fiesta religiosa. Alrededor de este día se realiza la tradicional matanza del cerdo. En el año 2018, por el 250 aniversario de la colonia, se procesionó por los tres pueblos del municipio.
Día de Todos los Santos
Fiesta dedicada a los difuntos. Las familias y los amigos se juntan para pasar el día degustando alimentos típicos como las gachas dulces.
El municipio se ubica en el camino real de Valencia, donde confluyen varias de las vías que atraviesan Sierra Morena y comunican Andalucía con La Mancha, con una importante presencia histórica de pastores y arrieros. Este factor ha propiciado una rica gastronomía que tiene como base el aceite de oliva virgen extra, que se mezcla con los productos de la huerta y la matanza del cerdo, la carne de monte y sus embutidos, el cordero, etc. Entre los platos elaborados más característicos encontramos las migas, ajo de harina, gachamigas, ajo de molla-pan, ajillo, calandrajos, galianos, gachas, etc. La repostería también es muy variada, mezcla andaluza y manchega con roscos de baño, roscos de la sartén, roscos de anís, florecillas, trenzados, hornazos, borrachuelos, tortas de manteca, rosco de San Marcos, brazos de gitano, etc.
Texto: Francisco José Pérez-Schmid Fernández
Fotografías: Antonio Gonzalo González y Área de Comunicación y Estrategia Fundaciones UPO