He ahí la foto de familia. Vamos a Roma. Es sábado, 15 de septiembre de 2018, y estamos en el aeropuerto de Sevilla. Esperamos tomar el avión que parte a las 21.25 hs. Y es que el lunes nos espera allá, en la capital italiana, toda la gente con la que nos hemos citado para hablar de santidad en el barroco iberoamericano. Somos doce y procedemos de las Universidades de Sevilla y de la Pablo de Olavide, unos de Historia Moderna y otras de Historia del Arte. Después de meses de trabajo organizativo, que nos ha obligado a generar los argumentos que den sentido a la reunión romana, hemos logrado reunir a un centenar de especialistas en la materia. Vista la juventud de gran parte de los retratados, se comprende que todos sintamos cierto nerviosismo. Ni los más viejos y expertos nos libramos de este rumor anímico. Sin embargo, la imagen muestra nuestros semblantes alegres porque, ante todo, tenemos la sensación de haber logrado culminar con éxito la primera y, quizás, la más importante fase del proceso: un diseño de convocatoria suficientemente atractivo como para convencer a quienes nos esperan junto a la Basílica. Allí nos encontraremos, asimismo con el resto del equipo, Paolo Broggio y Flavia Tudini, de la Università Roma Tre, y el maestro Marcello Fagiolo, con el Centro di Studi sulla cultura e l’immagine di Roma.
Los preparativos han sido complejos, el grupo ha funcionado, como ya es costumbre, a la perfección. Los más jóvenes han realizado gran parte de la tarea organizativa, supervisados por María de los Ángeles. Ellos han hecho posible que hoy viajemos con las maletas cargadas de materiales, desde la cartelería a los programas impresos. Y que, además, podamos hacerlo con la confianza de haber cumplido con la tarea. Los menos jóvenes (Jaime García Bernal y Fernando Quiles) nos hemos refugiado en la edad para liberarnos de una parte de la ingente tarea de gestión. Todo lo hemos tenido a la mano, así que nos hemos podido centrar en la convocatoria, afrontándola como un reto, en el afán de superar nuestras propias capacidades. Evidentemente, el tema lo merece, la propuesta ha funcionado por ello mismo y por la confianza que hemos generado. Y al fin nos vamos a Roma para encontrarnos en el mejor de los escenarios posibles con los y las colegas procedentes de América y Europa, disfrutando ante todo de algo que siempre va a ser un privilegio de quienes profesamos en la congregación del conocimiento: el aprendizaje permanente.
Para concluir, contraponemos la foto de familia con la instantánea de la presentación oficial del Simposio, realizada en la sala de actos de los Museos Vaticanos. Quedamos los menos jóvenes para dar la bienvenida: Jaime García Bernal, Marcello Fagiolo, Barbara Jatta (directora de los Museos Vaticanos), Paolo Broggio y Fernando Quiles.
En portada, foto de familia; en el aeropuerto de Sevilla, desde la derecha: Jaime García Bernal, Mª de los Ángeles Fernández Valle, Miguel Molina, Rafael González, Victoria Sánchez Mellado, Sara Jarana, Ana Aranda, Zara Ruiz, Fernando Quiles, Francisco Ollero, Clara Bejarano, José Manuel Caparrós y Rafael Molina.