Aunque el “hecho metropolitano” es único, existen diferentes formas de aproximarse a su definición, aunque todas ellas comparten el principio de que es la movilidad residencia-trabajo el elemento fundamental que lo configura como realidad territorial, y todas ellas coinciden en poner de manifiesto el crecimiento y el dinamismo del desarrollo y configuración de las áreas metropolitanas.
ONU
El punto de partida de la ONU para delimitar las áreas metropolitanas, establece un mínimo de 300.000 habitantes, a raíz de esta cifra, la definición “captura la extensión total de una ciudad, incluidas las áreas densas más allá de los límites municipales y define un área metropolitana como una ciudad y su zona de desplazamiento, que consiste en áreas suburbanas, periurbanas y rurales vinculadas económica y socialmente”.
Este enfoque está además apoyado por autoridades y expertos metropolitanos y las Perspectivas de la Urbanización Mundial (WUP). “WUP usa el término aglomeración urbana para ciudades cuyo territorio contiguo ha superado los límites “propios de la ciudad” e incluye las áreas suburbanas y periurbanas adyacentes. WUP también utiliza el término área metropolitana para incluir áreas rurales vinculadas social y económicamente”.
OCDE
Para considerar un área funcional o área metropolitana como tal, la OCDE utiliza estos cuatro requisitos:
- Un conjunto de celdas de cuadrísculas contiguas de alta densidad (1500 residentes por km2) con una población de 50.000 en las celdas contiguas.
- Una o más localidades que tengan al menos el 50% de sus residentes dentro de un centro urbano.
- Un conjunto de unidades locales contiguas que tienen al menos el 15% de sus residentes empleados trabajando en la ciudad.
- Un área urbana funcional es la convinación de la ciudad con su zona de tránsito.
COMISIÓN EUROPEA
Por otra parte, La Comisión Europea determina según Eurostat que un Área Metropolitana es un Área Urbana Funcional que tiene un mínimo de 250.000 habitantes. Establece que el 75% de su población vive en Áreas Metropolitanas y que se prevé que hacia 2050 sea el 80%.
¿QUÉ DICEN LOS EXPERTOS?
Si entendemos la ciudad metropolitana como un ámbito unitario de mercado de trabajo y vivienda, “un espacio colectivo”, se puede fácilmente colegir que es la movilidad de las personas que “viven” en ese espacio la variable fundamental para aproximarnos a dicha realidad. Pero dentro de ese conjunto, es la movilidad cotidiana por razón de trabajo la que mejor puede describir la extensión y la organización de la nueva ciudad metropolitana.
La variable residencia-trabajo constituye un excelente descriptor para entender la organización y estructura metropolitana, ya que, por su naturaleza, muestra la relación espacial que existe entre los lugares de residencia y los de empleo, y un área metropolitana es esencialmente un mercado unitario de vivienda y trabajo.
El tamaño mínimo requerido de los centros fue de 100.000 habitantes, aunque, en fases posteriores, se admitieron centros potenciales entre 50.000 y 100.000, siempre que la corona metropolitana superara los 50.000 habitantes. Por su parte, el umbral de integración se situó en el 20%, con un mínimo de flujo absoluto de 100 trabajadores o, alternativamente, del 15%, cuando el flujo era superior al millar de trabajadores.
¿QUÉ PASA EN ANDALUCÍA?
La Agenda Urbana de Andalucía establece que en la región andaluza 5.762.091 de personas viven en áreas metropolitanas, lo que representa el 70% del total de su población (referencia Agenda Urbana de Andalucía)