PLATAFORMA DE GENÓMICA FUNCIONAL

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La Plataforma de Genómica Funcional del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo (CABD) consiste en una instalación de 3.000 peceras en la que se investiga con peces cebra para avanzar en el conocimiento de las bases genéticas de enfermedades hereditarias en humanos.

La instalación posee una temperatura controlada que permitirá la cría y el estudio de un gran número de variantes de peces cebra transgénicos con distintas regiones reguladoras controlando la expresión del gen de la proteína fluorescente verde (GPF) en distintos tejidos y órganos. Y es que el pez cebra es un organismo en el que la transgénesis o el procedimiento por el cual se inserta un fragmento de ADN exógeno en el genoma del animal aceptor, es extremadamente rápido y eficiente.

El objetivo principal del proyecto de investigación que se desarrolla en la Plataforma de Genómica Funcional es la identificación del conjunto de las regiones reguladoras del ADN que controlan el uso de la información de cada gen en cada tipo celular, y que parecen estar conservadas en los distintos tipos de animales vertebrados. Estas regiones son necesarias para generar un vertebrado, lo que resulta esencial para entender no sólo los procesos de desarrollo y evolución, sino para identificar regiones candidatas a estar mutadas en enfermedades génicas.

El análisis de dichas regiones permitirá descifrar el lenguaje que opera en la regulación de la expresión génica, y por lo tanto descifrar el 90-95% del genoma que aún no se sabe interpretar. En definitiva, permitirá entender mejor cómo se construye un animal y facilitar el diagnóstico de enfermedades hereditarias así como la generación de modelos animales para estudiar dichas enfermedades.

Este estudio está financiado por un proyecto de cooperación Consolider en el que están implicados 26 grupos de investigación, un proyecto de investigación del Ministerio de Educación y Ciencia y un proyecto de Excelencia de la Junta de Andalucía.

La instalación ha sido financiada por la Universidad Pablo de Olavide, la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el Ministerio de Educación y Ciencia y la Fundación Conocimiento y Cultura.