Sevilla se vistió de morado el pasado 8 de marzo por el día internacional de la mujer. Un año más, se celebraron dos manifestaciones en el centro de la ciudad y una concentración en la Plaza del Pumarejo. El día soleado acompañó a alrededor de 70 000 personas en las marchas desde la Torre Pelli hasta el Palacio de San Telmo y desde la estatua del Cid hasta el Ayuntamiento. Aunque algunos aseguran que el número de participantes se ha visto reducido respecto al pasado año (130 000 participantes) por el COVID-19, la pandemia no consiguió frenar la lucha del feminismo por la igualdad.
La manifestación general se convocó por parte de la Asamblea Feminista Unitaria Abierta de Sevilla y dio comienzo a las 12:30 en la Torre Pelli. Desde el inicio, la manifestación estuvo reforzada por policías para controlar cualquier posible incidente. Numerosos grupos de batucadas acompañaron y animaron el evento. Asimismo, los típicos cantes feministas se escucharon a lo largo de toda la marcha. Además, con el fin de que todos los asistentes pudieran participar y disfrutar, los cafés feministas repartieron cancioneros con la letra de los cantes, así como pegatinas del 8M.
A lo largo de la mañana se pudieron encontrar asistentes de todas las edades: madres y padres con carros de bebés, jóvenes de diversas edades e incluso personas mayores acompañadas de sus familiares. Todos unidos por una misma causa: la igualdad. Aunque queda mucho por lo que luchar, días como estos recuerdan que sí se puede alcanzar la igualdad entre hombres y mujeres. Por eso creemos que es tan importante convertir esta manifestación en una tradición de cada año hasta al fin alcanzar una sociedad feminista.