Hace unos 30 años, en 1989, las obras en la calle Mateos Gago desvelaron que, justo por en medio de la calzada (en el tramo que va de Mesón del Moro a Fabiola), se encontraba sepultada parte de la antigua muralla judía. Aquel muro que aislaba a los hebreos del resto de la ciudad fue construido en el siglo III por orden del rey Fernando III, quedando hoy constancia de ello en la ya mencionada vía principal del barrio de Santa Cruz.

El Ayuntamiento de Sevilla está llevando a cabo en estos momentos “obras de renovación de las redes de saneamiento y de abastecimiento y de reforma estética de la calle” y asegura que protegerán al máximo este resto arqueológico que fue hallado en las décadas anteriores. La zona de Mateos Gago está protegida al formar parte del conjunto histórico de la ciudad de Sevilla, declarada Bien de Interés Cultural, por lo que las obras han tenido que pasar por la Comisión Provincial de Patrimonio. Así, se realizará un estudio arqueológico de la zona y además se supervisarán las obras diariamente por un arqueólogo con el fin de revisar cada avance de acuerdo a “un protocolo técnico avalado por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía”. El proyecto de ejecución contempla que la sustitución de las redes de alcantarillado por otras nuevas utilizarán el mismo trazado, por lo que se asegura que no se va a excavar a más profundidad de la que ya se llegó hace 30 años. Es por ello que habrá un arqueólogo a pie de obra para el control de tal fin.
Los límites del gueto
(Extraído del ABCdesevilla) La Judería se extendía por Santa Cruz y San Bartolomé, delimitada por las propias murallas de la ciudad y un muro que se construyó para aislar completamente este barrio, al que se accedía por dos puertas: una que había en Mateos Gago y la Puerta de la Carne, que daba justo a un prado conocido como el del Espantaperros. El nombre, ya de por sí, tenía una connotación antisemita patente.
La riqueza de la aljama era enorme: palacios, sinagogas, mercados…de aquella Judería ya casi no se conserva nada, salvo la muralla enterrada en Mateos Gago o el muro de la calle Fabiola y que perteneció a aquel cerco.
El muro enlazaba con el de la Alcazaba y proseguía por la calle Rodrigo Caro hasta Mateos Gago. En Mesón del Moro existía una puerta interior que llegaba hasta Fabiola. Continuaba por Federico Rubio hasta la parte trasera del convento de Madre de Dios, doblaba hasta San Nicolás -donde estaba la Azuzaica (zoco) y seguía por Conde de Ibarra, las Mercedarias, Vidrio, Armenta y Tintes.
Una Judería que es uno de los principales atractivos turísticos de Sevilla y que sigue conservando ese sobrenombre más de cinco siglos después de que los cristianos terminaran expulsándolos en 1492.
Fuente: https://sevilla.abc.es/sevilla/sevi-mateos-gago-calle-esconde-antigua-muralla-separaba-gueto-judio-sevilla-202005220736_noticia.html#vca=rrss-inducido&vmc=abcdesevilla-es&vso=wh&vli=noticia-foto