Alba Izquierdo RaceroLa consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Patricia del Pozo, ha presentado en el Museo Arqueológico de Córdoba un tesoro de joyas andalusíes del siglo XI. Este museo se configura como uno de los museos arqueológicos más importantes de Andalucía. Situado en el antiguo palacio de los Páez de Castillejo y en un nuevo edificio anexo, cuenta con piezas que abarcan desde la prehistoria hasta la Baja Edad Media. Se configura como un espacio extremadamente peculiar pues cuenta en el sótano con restos arqueológicos del teatro romano de Colonia Patricia Corduba, uniéndose en el museo piezas arqueológicas, un palacio del siglo XVI y un yacimiento arqueológico.
Este espacio tan singular será el encargado de albergar desde el 25 de febrero este tesoro compuesto por 98 piezas de oro, plata y plata sobredorada, 14 cuentas de piedras duras ‒cuarzo y cristal de roca‒, 4 cuentas cilíndricas de coral rosa, 31 cuentas cilíndricas de pasta de vidrio y 476 aljófares (perlas irregulares).
El tesoro fue hallado hace un año en el término municipal de Baena en Córdoba y desde esa fecha, las piezas del «Tesorillo de La Amarguilla», que recibe este nombre en honor a la finca donde fue hallado, se han sometido a un proceso de restauración. La intención ha sido en todo momento la conseguir recuperar la integridad de las piezas, garantizar su estabilidad y permitir su exposición.
A través de una profundización en el estudio del hallazgo se ha situado cronológicamente a comienzos de siglo XI. Se piensa que las piezas fueron escondidas debido a la guerra civil que se sucedió a finales del Califato Omeya. El tesoro se configura como uno de los mejores de los 16 conocidos, debido a la calidad, la cantidad y el estado de conservación. En una ciudad como Córdoba, donde el sector joyero y platero se conforma como uno de los pilares económicos fundamentales, el tesoro cobra especial relevancia.
Entre las piezas más destacables encontramos dos pares de ajorcas (aros de plata u oro), uno para las muñecas y otro que podría ser para los tobillos o los brazos. También destacan dos pares de arracadas de filigrana en oro (aro de metal, que se emplea como pendiente para las orejas). Por último, destaca otra arracada en cuyo interior se encuentra una estrella de seis puntas construidas con dos triángulos. Esta pieza es especialmente excepcional pues hasta el momento no existe nada parecido ni entre los tesoros conocidos, ni entre las joyas dispersas. Esto convierte a la pieza en única y añade un valor extraordinario al conjunto de la colección. Esto son solo algunas de las piezas que pueden encontrarse en el tesoro.
En una ciudad como Córdoba de gran valor histórico y artístico, este descubrimiento supone un legado sin igual para la ciudad y para nuestra comunidad. Esperemos que estos nuevos descubrimientos sirvan para llamar la atención de los andaluces y para que la próxima vez que tengamos la oportunidad de visitar Córdoba hagamos una pequeña parada en el Museo Arqueológico de la ciudad.
FUENTES
Cordópolis: https://cordopolis.eldiario.es/cultura/patrimonio/tesorillo
Junta de Andalucía: https://www.juntadeandalucia.es/presidencia/portavoz/cultura/w
