Carlos Usabiaga LópezHace unas semanas, antes de que se permitiesen los desplazamientos entre provincias, mi compañera del Patio Colorao Carmen Campoy y yo nos decidimos por ir a pasar el día a Utrera, que se encuentra a apenas media hora de la capital hispalense. Podríamos escribir muchos artículos sobre las grandes joyas patrimoniales que pueden visitarse en esta localidad, pero en este artículo os contaremos brevemente el recorrido que hicimos nosotros, para a ver si así despertamos el gusanillo en vosotros. ¡Seguro que sí!
Llegamos a la hora de comer porque teníamos reservas en un restaurante cerca de la Plaza del Altozano, pero si queréis aprovechar más la visita os recomendamos que vayáis más temprano que nosotros. Ni que decir tiene que comimos de maravilla. Eso sí, para el postre nos reservamos un huequito para los pasteles que hacen famosa a Utrera, como los mostachones o las lenguas de nata. Las principales confiterías y pastelerías las encontramos entre la Plaza de la Constitución y la Plaza de Santa Ana.
Una vez satisfecho nuestro apetito, nos dimos una vuelta por las calles adyacentes dejándonos sorprender por lo que íbamos encontrado en el camino. Podemos destacar en primer lugar la Iglesia de Santiago el Mayor, que se considera un Bien de Interés Cultural desde 1977. Este templo se empezó a edificar en el siglo XV en estilo gótico, pero su alargada construcción hizo que en él se mezclasen otros estilos, como el Barroco. La portada, llamada Del Perdón, es espectacular, aunque el estado de conservación pueda mejorarse. Justo al lado de esta iglesia se encuentra el Convento de las Carmelitas.
Imágenes propias
A pocos minutos de estos dos monumentos se halla el Castillo de Utrera, sobre un cerro natural. Esta construcción defensiva fue construida por el Consejo de Sevilla sobre los restos de una antigua torre árabe. La primera vez que aparece citado es por el rey Alfonso X, el Sabio en 1246 y fue destruido por el rey de Granada en 1368. Desde la conquista de Granada por los Reyes Católicos el castillo perdió su utilidad y quedó en ruinas hasta la actualidad. Se adecuado varias zonas del recinto para la visita y su uso, como el Patio de Armas, que alberga festivales y demás eventos.
Siguiendo la Calle Bohórquez llegamos a la Plaza Enrique de la Cuadra (que también se conoce como Plaza del Bacalao y que fue anteriormente la Plaza Mayor de Utrera), que a su vez nos llevó a la Plaza Porche de Santa María. En esta última, como su propio nombre indica, acoge la parroquia de Santa María de la Mesa, que, bajo mi punto de vista, es una de las iglesias más impresionantes de la localidad. También data del estilo gótico del siglo XV y su torre, de 60 metros de altura, es la más alta de Utrera junto con la de la vecina iglesia de Santiago. Esta imponente torre color arena destaca de entre las fachadas blancas de los edificios colindantes y acoge la monumental Puerta del Perdón. Esta puerta está compuesta a modo de gran arco de triunfo con casetones. Este edificio, que es Bien de Interés Cultural desde 1979, unifica también varios estilos diferentes, como el gótico, el Barroco o el neoclásico. Después de visitar esta iglesia nos tomamos una copa en una terraza situada en la azotea de un hotel cercano, desde donde conseguimos unas vistas espectaculares de Utrera al completo.
Imágenes propias
Esperamos que os hayáis hecho una buena idea de nuestra visita a Utrera y tenemos muchas ganas de que nos comentéis otros lugares interesantes para las siguientes, ¡porque sin duda volveremos! Podéis encontrar un vídeo de nuestra compañera Carmen Campoy de todos estos lugares en nuestra página de Instagram.
Nuestro recorrido fue más o menos así:
Fuentes
https://www.andalucia.org/es/utrera-turismo-cultural-castillo-de-utrera
http://www.santiagodeutrera.es
Carlos Usabiaga López
Alumno del quinto curso de Humanidades y Traducción e Interpretación en la UPO. Amante del arte y la cultura. ¡Siempre hay algo nuevo por descubrir!