San Juan de Aznalfarache esconde una rica historia y un patrimonio arqueológico de gran valor. Sin embargo, muy pocos conocen la verdadera importancia de su patrimonio y todo lo que este representa para entender, ya no solo la historia de este municipio, sino de la misma Sevilla y el aljarafe sevillano.

La historia conocida de San Juna de Aznalfarache se puede remontar hasta hace unos dos milenios, en época turdetana, puesto que con la sobras del metro de Sevilla se encontraron restos de un antiguo lagar en un emplazamiento conocido durante época tartésica como Osset. La importancia de este hallazgo se puede ver incrementada tras conocer que esta localización recibió su propio título de ciudad de derecho romano en tiempos del imperio romano pasando a ser denominada como Osset Iulia Constantia.

Podemos observar el avance de la historia en San Juan de Aznalfarache hasta llegar a la Edad Media a través de los vestigios que aún hoy en día se observan de buena forma de la muralla almohade que rodeaba una fortaleza en lo alto de la zona más alta del pueblo. Esta fortaleza, mandada a construir por el califa Al-Mansur a finales del siglo XII, permitía una visión clara de la ciudad de Sevilla y jugó un papel clave en la reconquista de la misma durante el S. XIII.

Por último, y ya entrados en época contemporánea. Encontramos otra serie de edificaciones de gran repercusión dentro del municipio. El Monumento al Sagrado Corazón de Jesús, construido a mediados del siglo pasado y donde se encuentra enterrado el Cardenal Segura junto con su familia; así como vestigios de las antiguas vías y estación de aquellos trenes que llegaban hasta las minas de Cala. Además, otro punto característico de esta villa es el famoso puente de hierro que conecta San Juan con Sevilla, una construcción que ha aparecido en películas y que cada año recibe a todos los peregrinos de sevilla que van camino de la aldea del Rocío.

A pesar de todo este patrimonio, San Juan presenta mucho más allá de edificios y restos de un calado histórico tan importante. Este municipio posee un patrimonio social y cultural de lo más interesante: el compositor Manuel López Farfán pasó sus últimos años asentado en la localidad, donde aún se conserva su casa; San Juan también es el supuesto lugar de nacimiento de una de las figuras literarias más importantes de la picaresca española, el Guzmán de Alfarache, obra escrita por Mateo Alemán.

En definitiva, San Juan de Aznalfarache es un municipio con una larga historia, la cual nos ha dejado numerosos vestigios. Un gran entramado patrimonial y cultural rodean este municipio que, desconocido por muchos, ocupó un importante lugar en la historia de Sevilla y de la misma península.

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