Las casas en Al-Andalus

En este artículo destacaremos la arquitectura civil, concretamente las casas islámicas que tienen una clara tradición mediterranea en comparación con las casas arábigas pero que tendrán en común la dedicación a la familia y a la intimidad pues están organizadas alrededor del patio interior el cual proporcionaba luz y ventilación, las cocinas también era un espacio importante y las estancias como los salones y alcobas. Las letrinas eran las estancias de dimensiones más reducidas y solían situarse en el exterior de las casas. Las casas del Al-Andalus tenían sendos muros con una única puerta de baja altura y en ocasiones también se encontraban los ajimeces, que eran un tipo de ventana o balcón saliente y cerrado por un enrejado que permite ver el exterior pero no el interior. Como se señalaba era muy importante la intimidad es por eso que también constaba con estancias divididas entre hombres y mujeres, la parte baja era utilizada por los hombres para recibir visitas mientras que la parte de arriba era destinada para mujeres y niños. Además, solían convivir varias generaciones de una misma familia, dándose a surgimiento de adarves o calles sin salidas que cerraban con cancelas, salvaguardando aún más la intimidad de la familia. 

Dentro de las casas del Al-Andalus se dividen en Casa Emiral, inspirada en un patio andalusí donde la privacidad y la higiene eran muy importante. Los patios eran la zona más significativa, las paredes estaban decoradas con pinturas, contaba con fuentes, elementos vegetales, y a veces, porque no todas las casas podían tenerlo, tenían un pozo que abastecía de agua. En la Casa Califal destaca la característica de que podría haber tenido una planta alta ya que se han encontrado restos de escaleras así como el grosor de los muros era mucho ancho. Las plantas eran uniformes y se encuentran casas sin patio central pero también con patio que solían ser trapezoidales o cuadrangulares. Los patios más elementales tenían pavimentos de tierra con cal. 

En las casas de los Reinos Taifas se siguieron utilizando las técnicas constructivas de la etapa califal, como la mampostería en cimientos y zócalos pero se produce en este momento un importante cambio en los materiales utilizados en la arquitectura, con la introducción de la argamasa, el ladrillo, y el yeso, de esta manera la arquitectura gana en riqueza ornamental y pierde solidez estructural. Las casas en la etapa Almorávide son las que se han podido conocer y estudiar mejor. las casas fueron evolucionando con algunos cambios en la disposición de albercas, andenes que cubrían la superficie del patio y zonas ajardinadas, un ejemplo de este tipo de arquitectura en los patios es la Casa de la Contratación de Sevilla. La gran cantidad de decoración en yeso permitió que el arte almohade llegase hasta las poblaciones modestas. 

Por último, La casa nazarí será una arquitectura que seguirá las tradiciones constructivas anteriores pero que a su vez dejará un legado para la tradición arquitectónica posterior. Las casas nazaríes de de perteneciente a las clases privilegiadas presentaban un patio con dos pórticos enfrentados con salas a doble altura y habitaciones de menor importancia a los otros lados. Para la construcción de las plantas altas se usaría tierra mezclada con cal para las paredes y para las  partes bajas se usarían tapias de mampostería con pilares de ladrillo para evitar las humedades, un ejemplo es la Casa de Zafra en Granada. 

Fuentes:

Orihuela, Antonio: Casas y palacios de Al-Ándalus, siglos XII y XIII. Sierra Nevada ’95-El legado Andalusí- Lunwerng Editores S.A. 

Orihuela, A. (2007). La casa andalusí: un recorrido a través de su evolución.

Valor Piechotta, M. (2008). Sevilla almohade. Sarriá.