Sandra Pérez SerranoLa localidad de Tarifa fue el pasado 10 de marzo sede de unas jornadas organizadas por la dirección del Parque Natural del Estrecho llamadas «Patrimonio sumergido: historia, arqueología y fondos marinos como recursos en economía azul» con la ayuda de la Junta de Andalucía , Atlántida Medio Ambiente y la Unión Europea.
Este turístico enclave gaditano acogió en la Casa de la Cultura este evento con el objetivo de dar a conocer el estado en el que se encuentran los recursos subacuáticos del Estrecho de Gibraltar en las playas de Tarifa: Los Lances y Valdevaqueros, por la zona Atlántica y conocidas por la actividad de deportes de agua como el Windsurf, y la Isla y la Playa Chica, calas mediterráneas y visitadas para el buceo o el avistamiento de cetáceos.
Se trataron también temas como la biodiversidad de hábitats subacuáticos, la historia naval de la zona (desconocida para la mayoría de participantes), las rutas arqueológicas subacuáticas o la imagen como recurso para la valorización de estos lugares, así como su repercusión en el turismo en masa.
Para concluir el programa, se hizo una visita al Centro de Interpretación de la Isla de Tarifa antes de presentar conclusiones, pues hay mucho que debatir sobre la gestión del patrimonio subacuático y paisajístico de la zona. La mayoría de los que se ocupan de ella son empresas privadas enfocadas a un turismo con una clara intención recreativa y, por lo tanto, la mayoría dedicadas a organizar actividades de visita. Sin embargo, el Ayuntamiento debería involucrarse más en la cuidado de este tesoro natural, así como de la difusión e investigación a cerca de la historia que hay detrás de estos lugares. Ejemplo de ello es el desconocimiento general sobre la historia naval de Tarifa, siendo un punto clave y único entre Europa y África (fundamental en el desarrollo de periodos convulsos de la historia) o el trato que se le ha dado a la Isla, que hasta este mismo año estaba cerrada al público por ser zona militar.
Sin duda, se trata de unas jornadas que acercan a la sociedad este recurso tan importante, rico y amplio de la comarca y que pueden concienciar a la población sobre cómo se está gestionando su tierra y su historia, que no dejan de ser parte de ellos mismo y su identidad.
