Hoy os traemos una curiosidad muy interesante  en la que seguro que la mayoría de vosotros no os habéis fijado nunca al caminar por algunas de las calles más transitadas de la ciudad de Sevilla. Para apasionados del fútbol es una manera de ver como el patrimonio siempre forma parte de nosotros de una manera u otra.

¿Sabías que en algunas de las calles de Sevilla se encuentran representados los escudos de las dos aficiones futbolísticas más grandes de nuestra ciudad: el Real Betis Balompié y el Sevilla Fútbol Club?

Si eres futbolero y alguna vez has pensado que el tema del patrimonio es aburrido, o quizás pienses que la forma en la que te lo han transmitido tus profesores o tutores ha sido un poco aburrida. acércate a ver estos escudos escondidos en nuestra calles y verás que el patrimonio puede ser mucho más interesante y cercano a ti de lo que hasta ahora lo había sido.

La gran pregunta  es: ¿eres aficionado del Real Betis Balompié o del Sevilla Fútbol Club? Pues bien, no importa de cuál seas porque esta gran ciudad alberga el sentimiento tanto de una como otra afición y no deja atrás a ninguna de las dos en su patrimonio viario.

Si quieres conocer estos escudos secretos date una vuelta por el centro; quizás te encuentres otra curiosidad de nuestro patrimonio que no sabías y que te puede interesar.

Plaza Nueva

Fuente: Sevilla Secreta

Calle Imagen

Fuente: Sevilla Secreta

Calle Azafrán

Fuente: Sevilla Secreta

El sentimiento de afición por nuestros dos grandes equipos no solo se queda en las calles de nuestra ciudad, sino que se sigue extendiendo en nuestro corazones y en nuestras acciones. Es por ello que Antonio Mendoza, perteneciente a una familia de campaneros que lleva varias generaciones  fabricando campanas para las iglesias de toda Andalucía, ha decido realizar un escudo del Sevilla Fútbol Club en una de las campanas que se encuentran en la Iglesia del Salvador. Esta iglesia constituye sin duda una de las obras artísticas e históricas más importantes a nivel monumental de la ciudad de Sevilla, puesto que fue la segunda mezquita aljama de la ciudad. Aquí os dejamos el enlace para que conozcáis de primera mano la historia de Antonio y su amor por las campanas y el fútbol.

 

No olvides que todo esto es patrimonio de nuestra ciudad, así que ser aficionado al fútbol también te hace de alguna manera amante del patrimonio.

 

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