Excavación del Patio de Banderas desde el norte (abajo) a sur (arriba). Al fondo niveles romanos del sector meridional. En primer término, estructuras tardoantiguas situadas tres metros sobre el nivel republicano (fotografía M. A. Tabales).

El Puerto Romano de Sevilla, también conocido como Portus Hispalensis, desempeñó un papel vital en el comercio marítimo de la Península Ibérica durante la Antigüedad. A través de excavaciones arqueológicas realizadas en las últimas décadas, hemos obtenido una visión más detallada de este importante enclave histórico.

Desde al menos el siglo II a.C., este puerto fue uno de los más activos de la región, facilitando el transporte de diversos productos hacia Roma, como aceite, minerales, vino, sal, pescado y trigo. Las investigaciones han revelado la presencia de varias instalaciones portuarias en Sevilla, algunas de las cuales datan de la época republicana, mientras que otras pertenecen al período imperial.

Durante la época imperial, los principales enclaves portuarios se encontraban cerca del Palacio de San Telmo y La Florida. Uno de los descubrimientos más destacados fue la identificación de un gran edificio portuario en el Patio de Banderas, que abarcaba desde finales del siglo II a.C. hasta el primer tercio del siglo III d.C.. Sin embargo, este edificio sufrió una devastación provocada por un “evento energético” externo de gran magnitud.

Los arqueólogos han debatido sobre la naturaleza de este evento. Algunos sugieren que podría haber sido un tsunami originado en la Bahía de Cádiz, mientras que otros plantean la posibilidad de que haya sido un ciclón tropical. Las pruebas científicas y arqueológicas, incluyendo análisis de carbono 14, micromorfología, mineralogía y geoquímica, respaldan la hipótesis de un evento violento que desplazó muros y dejó evidencia de fauna marina y arena en el lugar.

La exención de tributos en la Bética entre los años 245 y 253, como lo indican inscripciones encontradas en Écija, sugiere una especie de declaración de zona catastrófica por parte del Imperio Romano. Este hecho respalda la gravedad del evento que afectó al puerto de Sevilla y posiblemente a otras áreas costeras. Es probable que un tsunami haya causado daños significativos en las costas, lo que llevó al Imperio a eximir a la región de pagar tributos durante ese período.

En resumen, el puerto romano de Sevilla fue un componente esencial del comercio marítimo en la Antigüedad, facilitando la conexión entre la Península Ibérica y Roma. A través de excavaciones arqueológicas, hemos logrado una mejor comprensión de la importancia y el funcionamiento de este puerto histórico. Sin embargo, su historia está marcada por un “evento energético” de gran magnitud en el siglo III, que dejó una profunda huella en la ciudad y en la región circundante. La investigación continua ofrece nuevas perspectivas sobre este importante enclave histórico y su papel en la economía y la cultura del Mediterráneo occidental durante la Antigüedad.

noticia sacada de: El rastro de la Historia El puerto romano de Sevilla y el ‘tsunami’ que lo arrasó (diariodesevilla.es)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos Ver más

  • Responsable Universidad Pablo de Olavide.
  • Finalidad  Moderar los comentarios. Responder las consultas.
  • Legitimación Su consentimiento.
  • Destinatarios  Universidad Pablo de Olavide.
  • Derechos Acceder, rectificar y suprimir los datos.
  • Información Adicional Puede consultar la información detallada en la Política de Privacidad.