Sofía Montero CorralesSevilla no es solo conocida por sus grandes monumentos como la Giralda o la Maestranza, sino que también tiene importantes museos que albergan valiosas colecciones y velan por su difusión, como el Museo de bellas artes o el Museo andaluz de arte contemporáneo. Sin embargo, no solo los museos y salas de exposiciones de carácter público organizan actividades culturales, otros grandes espacios, como CaixaForum Sevilla, son grandes propulsores del arte.
La fundación CaixaForum es una organización cultural que nace del banco mallorquín CaixaBank, que se ha encargado de edificar o remodelar edificios en diferentes ciudades españolas como Madrid, Zaragoza o Sevilla, y convertirlos en centros culturales para «acercar la cultura a todos los públicos para vivirla a través de una gran programación variada» (CaixaBank, 2024).
El edificio sevillano de esta organización se encuentra en Puerta Triana, construído en 2017 por el arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra, en el mismo espacio que el proyecto Torre Sevilla, de César Pelli, con el fin de promover la cultura en todos sus formatos, desde exposiciones de arte hasta conciertos y proyecciones de películas. Ellos mismos se definen como: «el estandarte cultural de la Fundación “la Caixa” y se ha posicionado como uno de los referentes en cuanto a acceso y difusión de la cultura. La decidida apuesta de la institución por la divulgación del conocimiento, la cultura y la ciencia como agentes de mejora social se traduce en un estilo de proyecto reconocible y asimilado por el público» (CaixaBank, 2024). CaixaForum Sevilla se organiza en un espacio interior de 8.100 metros cuadrados con dos salas de exposiciones, un auditorio, un aulario y toda clase de servicios, como taquillas o tiendas.
El espacio sevillano es merecedor de una publicación en este espacio pues oferta mucha variedad cultural: tiene convocatorias de concursos, microconciertos o happenings; programación especial para niños y familias; conciertos como los «Domingos Musicales»; «EduCaixa», que es un programa de actividades culturales educativas como visitas guiadas o visitas-taller al espacio y sus exposiciones; todo ello con posibilidad de ser adaptado a cualquier tipo de discapacidad o necesidad física.
Actualmente hay dos exposiciones, aunque cambian cada cinco meses, aproximadamente: «Visiones expandidas. Fotografía y experimentación (1 diciembre 2023 – 31 marzo 2024)»; la que presenta la historia de la fotografía experimental desde finales del siglo xx hasta la actualidad, con ejemplos de algunas de las fotografías más simbólicas de este movimiento. Y «XIX. El siglo del retrato. Colecciones del Museo del Prado (23 febrero – 9 junio 2024)»; donde se muestran, a través de obras procedentes del Museo Nacional del Prado, las diferentes técnicas del retrato del siglo XIX y por qué este tipo de pintura era tan popular en esa época.
Aquí vuestra redactora todavía no ha ido a ver ninguna de las que actualmente están para visitar, pero se declara fan total de la labor que hace Caixaforum con la cultura. Todos los años va a ver sus exposiciones pues innovan lo presentado y no se limitan al mundo del arte, sino que también presentan investigaciones del ámbito de la ciencia de manera didáctica y entretenida para todo tipo de público y de necesidades.
Como no puedo hacer (todavía) un resumen de las nuevas exposiciones, puedo resumir la que hasta ahora ha sido mi favorita: la CinèMode, de una de las figuras más famosas de la moda francesa: Jean Paul Gaultier, en la que nos muestra su trayectoria artística a través del cine.
Antes de sumergirnos en la exposición, un breve resumen de la vida de Gaultier: nació el 24 de abril de 1952 en Bagneux, y tenía sólo dieciocho años cuando entró como aprendiz en la casa de modas de Pierre Cardin. Pronto despuntó entre el resto de jóvenes diseñadores y lanzó su primera colección, creando su propia marca en los años setenta hasta 2020, cuando se retiró del mundo de la moda con un icónico desfile (la firma continúa pero son otros modistos los que diseñan la ropa, como el también francés Olivier Rousteing). En resumen, tuvo una excelente carrera profesional, a menudo calificado como el enfant terrible de la moda, y se ha convertido en un icono de Francia y de la moda con sus corsés, sus camisetas de rayas, sus perfumes y su excentricidad.
En cuanto a la exposición, la visité en Sevilla en diciembre de 2023 y su definición perfecta sería una fusión entre dos de las grandes artes del mundo: el cine y la moda, explicando la trayectoria profesional de Jean Paul Gaultier y sus influencias en el mundo cinematográfico. Es importante decir que toda la distribución y decoración de la exposición fue ideada por Gaultier.
La primera sala estaba dedicada a los inicios de su carrera profesional: la protagonista es la película Falbalas, de Jacques Becker, que muestra la vida en una casa de modas y animó a Gaultier a convertirse en modisto. Él mismo suele decir: «Sin el desfile de Falbalas, nunca habría hecho este trabajo». También hay cierta pieza icónica: uno de los primeros corsés que Gaultier diseñó para Madonna para sus grandes giras mundiales, muy característico de la firma, con la parte del sujetador en forma triangular.
La segunda sala nos muestra prendas del cine un poco más «antiguo», con copias de vestidos de Marilyn Monroe, Rita Hayworth y Brigitte Bardot. Aunque la sala está muy dedicada a las primeras mujeres de la industria, también hay algunas piezas muy interesantes, como el traje de Superman, el del Zorro (diseñado por Gaultier) y los pantalones de John Wayne.
En la tercera sala nos transportamos a un mundo donde nada tiene sentido, un espacio reservado a la vertiente de rebeldía y reivindicación de Jean Paul Gaultier, donde no existen los roles de género y se aceptan todos los tipos de amor. Todo esto se muestra en su colección Toy Boy, donde los hombres son vistos como juguetes, y en la ropa diseñada para algunas de las películas de Pedro Almodóvar, como Kika o La mala educación (que también muestra su fuerte relación con España). Todas estas salas estaban acompañadas por piezas de películas de esta temática, como la que acabo de mencionar o The Rocky Horror Picture Show.
La cuarta sala es una de las más personales para el diseñador, ya que nos muestra la locura de los años 70, cuando empezaba en el mundo de la moda: con modelos de la modelo Twiggy luciendo vestidos estampados con pinturas de Mondrian, una reproducción del traje principal de la película La naranja mecánica, utilizado en el último desfile de JPG y la película ¿Quién eres, Polly Maggoo? del director William Klein, que es una crítica al mundo de los reality shows pero con una estética que influyó mucho al diseñador.
La quinta y última sala es la más pequeña y nos muestra prendas de pasarela acompañadas de fotogramas de pasarelas icónicas del cine, como Audrey Hepburn en Funny Face, pero la pieza principal es el vestido que lucieron las modelos Naomi Campbell en 2002 y Bella Hadid en Cannes en 2021.
Hay muchas piezas en la exposición de las que no puedo hablar por falta de espacio, pero creo que la intención de Jean Paul Gaultier al crear esta exposición fue clara: mostrarnos su fascinación por el séptimo arte, las influencias que de él tomó y le dio, y su deseo de hacer una moda loca e inclusiva.
Información y fotos obtenidas en: https://caixaforum.org/es/sevilla
