Los cuatro pilares de la capacidad innovadora.
Por Juan Cano-Arribí, www.innovacionporobjetivos.com.
Decía Charlie Crews –el policía budista de la desaparecida serie Life– que “todo está conectado”, y puesto que todo está conectado voy a renunciar a asignarle un único origen a la Innovación por Objetivos.
No obstante, dos factores básicos han motivado su gestación. Las mismas dos circunstancias que al encontrarse suelen ocasionar la aparición de nuevas prácticas: necesidad y conocimiento. Por un lado, las empresas que deseaban innovar necesitaban contar con una metodología de gestión de la innovación que pensara en sus términos, esto es, que fuera algo práctico, perfectamente aplicable a la vida real de la empresa y sobre todo que ofreciera resultados económicos que pudieran medir.
Por el otro lado se encontraba el convencimiento de que la capacidad innovadora de una empresa se basa en realidad en sólo cuatro pilares:
- Una actitud innovadora deliberada, proactiva y orientada a resultados cuantificables.
- La sistematización de los procesos de innovación.
- Un entorno estimulante de la innovación y el compromiso de las personas.
- El necesario seguimiento de lo anterior (resultados, proceso de innovación y personas).
Con estas mimbres y a la luz de aquella necesidad se diseñó el cesto de la Innovación por Objetivos. Este cesto, todo hay que decirlo, ha evolucionado bastante desde aquella propuesta inicial, debido a la necesidad antes mencionada de que fuera algo práctico y adoptable por las compañías. Esto significa entre otras cosas que la metodología de la Innovación por Objetivos debe ser fácil de gestionar por los responsables de la innovación, de forma que pueda adoptarse este nuevo proceso de innovación sin interferir en los procesos ordinarios de la empresa ni provocar fricciones que alimenten la resistencia al cambio.
Otro aspecto que ha marcado la evolución de la Innovación por Objetivos es la necesidad de facilitar la participación de cualquier persona, tanto de la empresa como fuera de ella (open innovation), sin que esto represente un estorbo para el trabajo diario de la gente ni una carga burocrática para quien gestiona el proceso de innovación.